Por mucho que nosotros intentemos crear un buena armonía en nuestro dormitorio mediante el Feng Shui, la iluminación, los muebles, etc., para conseguir un buen descanso necesitaremos un colchón que se adapte a las necesidades de nuestro cuerpo. Los más comunes son:

• De muelles: es el más tradicional en nuestro país ya que ofrece distintos grados de firmeza según el tipo de muelle. A su favor tienen que son más ecológico, resistentes y traspiran bien.
• Látex: este material se amoda perfectamente a cada cuerpo, lo cual ayuda al descanso y al confort. Puede ser natural o sintético.
• Viscoelástica: ofrece mayor adaptabilidad al cuerpo. Además reacciona al calor y puede encontrarse en dos tipos: viscoelástica moldeada y transpirable.

• Viscolátex: se adapta a las formas del cuerpo habiendo que los músculos se relajen, permitiendo un descanso mejor.
• Espuma: no son los más recomensables para el uso diario, aunque sean los más baratos.
• Agua: no son lo más utilizados ni los más recomendable aunque si son muy originales.