Porque sabemos lo neceario que es tener una buena iluminación en la cocina. Sin duda, es una de las grandes claves para que este espacio tenga una nueva visión. Queremos y necesitamos aprovechar la luz de una manera perfecta porque así, la habitación nos dará sensación de amplitud al mismo tiempo que tendremos más energía para poder hacer todo lo necesario en ella. ¡Disfruta con estos grandes consejos!.
Lo mejor de todo es que tenemos que aprovechar la luz solar. Sin duda, sería uno de los mejores consejos que podríamos tener. La luz solar es siempre vital para todos nosotros y ésto también se puede demostrar en espacios como la cocina. Así que, si contamos con una cocina exterior, siempre nos vamos a ayudar de ella. Si es un poco pequeña, entonces recuerda que pintándola de color blanco vamos a potenciar el efecto de la luz. Lo mismo ocurre si contamos con unos muebles de colores claros. Dará la sensación de estar en un lugar más luminoso.
En la cocina solemos contar con una luz que viene del techo. En ocasiones con una luz blanca. Pero no te quedes solo con ella. Sí es verdad que estamos acostumbrados a ver solo ésta que proviene de esta zona, pero siempre es necesario aprovechar más cada detalle de nuestra cocina. Cada rincón y cada zona de trabajo tienen que estar perfectamente iluminada. Claro que solo con la luz del techo no va a llegar.
Justo en la zona donde cocinas, puedes añadir unos pequeños puntos de luz LED. Son muy sencillos de conseguir y además, suelen contar con una colocación de igual manera. Es decir, no es necesario que los pongas fijos, también los hay de tipo adhesivo. También puedes iluminar la zona de las alacenas, donde tenemos los pequeños detalles que necesitan de luz para que no se nos escape ninguno.
Si cuentas con una cocina más amplia, entonces quizás tengas una isleta central. Pues bien, es otra de las zonas básicas para poder ser iluminadas. Una zona vital donde aprovecharemos para cocinar pero también para desayunar o tomarnos una copa. Coloca unas luces blancas y unas lámparas que sean un poco alargadas y que tengan una distancia perfecta con el mueble en cuestión. En ocasiones se dice que por cada metro cuadrado, tenemos que tener un punto de luz. Aunque si tienes y techo muy alto, ya sabes, añade varios.