Hay diversos tipos de librerías para el salón que se adaptan a los distintos estilos de la estancia, así como a las necesidades de sus dueños. Y es que los libros, CDs y DVDs son una constante en la mayoría de los hogares y exigen una librería con capacidad para guardarlos. En la actualidad, además, muchas librerías integran una zona de imagen y sonido para poner la televisión, el reproductor de DVD o la cadena de música.
Para empezar podemos hacer una clasificación de las librerías teniendo en cuenta el material: madera, cristal, aluminio, etc. Además también se puede hacer una clasificación tomando como referencia su estructura:
- Librerías de obra: realizar un diseño personalizado para la librería es la forma óptima de aprovechar al máximo el espacio. Crear una librería desde el techo hasta el suelo en madera, aprovechar el retranquero de la pared para hacer una librería empotrada, integrar la librería e la pared con bladas del mismo color, etc.
- Librerías sin trasera: resultan muy ligeras, al permitir ver la pared posterior. También se pueden utilizar como separadores de ambientes, utilizándolas (si son anchas) a dos caras.
- Librerías modulares: permiten adaptar la librería a las características de tu casa, gracias al sistema de módulos, que podemos sumar o restar en función de nuestras necesidades.
- Librerías con puertas correderas: protegen los objetos del polvo y la luz y permiten esconder el televisor. Además al ser correderas dejarlas abiertas no supone ninguna incomodidad.
- Librerías altas: si cuentas con techos altos puedes poner librerías de hasta 3 metros de alto, pero recuerda poner una escalera delante para poder acceder al contenido de los estante superiores.