Muchas veces no sabemos qué poner en una mesa que nos quede bien con el resto de muebles de la sala. Muchos piensan que unas flores en un jarrón es la mejor opción pero hay que tener en cuenta que las flores, en el caso de que sean naturales, requieren muchos cuidados para que no se estropeen y hay que cambiarlas cada poco tiempo; la otra opción son las flores artificiales pero no siempre dan una buena imagen y tiene que ser de muy buena calidad para que no queden mal.
Pero ¿por qué no poner un jarrón simplemente, sin flores? Hay jarrones que pueden llegar a ser mucho más decorativos que si se les añaden flores. Un ejemplo son los jarrones con forma de botella que tiene formas curvadas en el cuello.
Otra opción es poner un centro de mesa, del mismo color que tengan el resto de los muebles de la sala o de un color complementario. Los más originales son los que tienen formas irreguales. Estos centros nos pueden ser muy útiles ya que además de cómo elemento de decoración se les puede utilizar para colocar cosas que nunca sabemos dónde poner como las llaves, el mando de la televisión, etc.
Como siempre la mejor opción depende de los gustos de cada uno y de la utilidad que se quiera dar a este objeto.