Si te gustan los objetos y hasta los muebles fabricados con mimbre, entonces te encantará lo que sigue. Claro que no te habías decantado por ello, no está de más que también te quedes y compruebes lo que puede llevar a hacer el mimbre en nuestra decoración. Como sabrás, es un material vegetal que se obtiene de un árbol que pertenece a la familia de los sauces y de ahí, podremos completar todas las imágenes que hoy te mostraremos. Porque cada uno de los detalles puede estar integrando tanto los salones como los baños y hasta los dormitorio. ¿No te lo crees?, pues descubre lo que sigue.
Cuando decoramos con mimbre, lo mejor es que lo integremos siempre dentro de un ambiente cálido que esté compuesto por muebles sencillos y combinados por la gama de colores marrones. Tanto el marrón más intenso como el beige se dará cita en los interiores más especiales. La decoración con mimbre aparece en la primera imagen de la mano de una mesita central y además, de los cestos que acompañarán la parte baja del banco. De este modo, estaremos ante una decoración con estilo rústico y moderno.
Si no te gustan los cestos para este tipo de salones, pero sí el material del mimbre, entonces déjate llevar por solamente un par de detalles del mismo. En este caso, se trata de añadir como mesita central dos taburetes circulares. Eso sí, siempre dejaremos que los muebles cuenten con el color marrón así como los detalles que los rodean.
Tanto para los pasillos como para las entradas, siempre podemos ayudarnos de un banco. En su interior, nada mejor que dejar hueco para nuevos cestos de mimbre. Eso sí, como vemos, aquí el marrón se convierte en muebles en negro pero sin perder toda la magia que ello conlleva. ¿Qué te parece una idea así como recibidor de tu hogar?.
Porque con una simple maleta de este material ya tendremos un ambiente de lo más acogedor. Si por un lado, la madera es uno de sus fieles compañeras, por otro, la forja no se queda atrás. Combínala con estampados tan sencillos como éstos. Un manera de crear un estilo vintage pero siempre acorde a nuestros días.
Porque el estilo rústico se puede acoplar a cada espacio e interior. Ahora nos quedamos en la cocina. Ante nosotros vemos cómo el color marrón vuelve a ser protagonista frente a unos muebles envejecidos y perfectos para que en esos huecos que quedan, sea el mimbre quien termine de decorarlos.