Sabemos que la decoración para salones puede ser de lo más variada. Ya no solo por los muebles que podemos elegir para ella sino también por la amplia selección de colores que tenemos para ello. Hoy nos decantamos por la combinación de dos colores muy especiales. Por un lado el toque dulce y oscuro del chocolate que suele poner la nota más elegante de todo tipo de decoración. Aunque por otra parte, nada como el toque más picante y llamativo del color rojo. Una idea perfecta para llenar nuestros salones de un nuevo concepto en cuanto a decoración se refiere. ¡No te la pierdas!.
Para un entorno muy elegante, la combinación del color rojo y el del chocolate tiene que hacer de equilibrio en ella. De este modo, siempre puedes ir integrando a nuestros protagonistas pero de una manera sencilla y con calma. Para ello, puedes comenzar con los detalles, que a modo de pinceladas se vestirán de color rojo. Tanto algún cuadro en la pared como algunos cojines. Para el color chocolate, siempre tienes la opción de los muebles más grandes como el del televisor o la mesa central.
Del mismo modo, siempre podemos hacer una combinación de lo más original, gracias a estos dos tonos. Por un lado, los podremos disfrutar en el sofá principal y de nuevo, en los detalles que vemos por la pared o por el suelo, en forma de alfombra. Aunque además, siempre puedes añadir un tono más claro gracias al beige.
Parece que esta es una de las ideas más seguidas en la mayor parte de los salones. Una idea que en esta ocasión también se deja llevar por la alfombra roja en su totalidad. Aunque como vemos, el sofá cuenta con el color chocolate elegido y tan solo son dos cojines y un cuadro quienes ponen la nota más llamativa.
En este nuevo ejemplo, y cambiando un poco todo lo anterior, vemos cómo el color rojo se hace menos intenso y que además se combina en la zona de las paredes junto con el marrón chocolate. De esta manera, nos deja un entorno original en el que los muebles pueden ir en una madera más clara para que resalten o bien, decantarnos por el color negro que complete una zona como ésta.
Para terminar, volvemos al rojo más pasional que en esta ocasión, se deja ver tanto en las paredes como en el sofá. Eso sí, también se mantiene el color blanco muy cerquita para compensar la combinación más luminosa. Para el chocolate, nada como una alfombra en marrón intenso.