Sin duda las ideas en cuanto a la decoración de interiores no dejan de surgir. Una de ellas es decorar nuestra casa con paredes de cristal, que sin duda es una opción muy elegante y minimalista. Pueden quedar muy bien a la vida, pero lógicamente tienen sus ventajas y sus inconvenientes.
Por un lado, se pueden usar como separador de ambientes. Dentro de un mismo salón, podrás colocarlas para separar una zona de lectura o despacho, dándole intimidad al entorno.
Crea un ambiente muy moderno y minimalista, además de aprovechar la luz al máximo, que siempre viene bien, sobre todo en espacios o habitaciones más reducidas. Podrás elegir entre unas puertas totalmente transparentes o con ciertos estampados.
Aunque parece que todo son ventajas, siempre hay algún inconveniente que lo estropea todo. En este caso es su precio, que sin duda, es algo que nos preocupa y mucha gente cree que se pierde la intimidad, aunque siempre dependerá de en qué habitación las coloquemos. Una alternativa para unos pocos privilegiados.