Porque cuando hablamos de hacer una renovación en la decoración de interiores, siempre se nos viene a la cabeza el tener que volver a comprar uno a uno todos los muebles que la componen. Pues bien, no siempre es así, lo que implica un menor gasto económico. Así que parece que todas son ventajas ya que solamente vamos a necesitar la pintura con la que le daremos un nuevo aire a nuestra habitación. Tanto en las paredes como en los muebles…¡todo puede cambiar en cuestión de minutos!. ¿Estás preparado para comenzar la reforma?.
El dormitorio es una de las estancias con las que más cuidado debemos de tener porque siempre hay que conseguir un entorno tranquilo y relajado donde el descanso se apodere de nuestras horas principales. Claro que cada uno, puede decorarlo con los colores que prefiera y de ahí, que hayamos elegido esta bonita combinación para comenzar. Se trata del blanco y el negro. Intenta que sea solo para las habitaciones más amplias. La pared del cabecero irá combinada en ambas tonalidades con unas líneas gruesas. Al mismo tiempo, podrás pintar también las mesitas con pintura especial para muebles.
Uno de los colores fundamentales para este entorno, es el azul. Sin duda, con él podremos crear esa atmósfera tan especial que andamos buscando. Se trata de combinar varios tonos de este color y mezclarlos con el blanco. Es por ello que las paredes del dormitorio, pueden dejarse llevar por una pintura lavable, ya que si eliges un tono claro, puede ser muy fácil que se manchen antes de darnos cuenta. Con un color así, deja que los muebles vayan en blanco, usando pintura especial para ellos.
Lo mismo ocurre con el color malva. También gracias a él, podemos dejar que los muebles en color blanco hagan su aparición para crear una atmósfera más suave y cálida. De este modo, podrás hacer combinaciones en la pared, pintando una mitad del color básico por excelencia y otra, del tono malva elegido. ¿Qué te parece una idea como ésta para tu dormitorio?.
Para completar una decoración moderna y sencilla, nada como dejarnos llevar por la pintura en las paredes que sea de color marrón, ocre y combinada con pinceladas en amarillo. Claro está, este último color lo podrás hacer ver en las sábanas y hasta en algún detalle que tengas a mano. Aunque tengas unos muebles un tanto antiguos, seguro que no hay nada que una capa de pintura no pueda hacer. ¡Una manera muy sencilla de remodelar tu habitación!.