El estilo que a menudo vemos en la moda, también lo podemos tener en nuestra casa, porque igualmente moda es. En este caso uno de los motivos más clásico y comunes de nuestras prendas es la pata de gallo, que sin duda, en la decoración de interiores, puede quedar realmente espectacular.
En los sofás o en las sillas, puede ser uno de los estampados que den mucha vida al entorno y además, gracias a la combinación del color negro y blanco, la sofisticación está asegurada.
Si hablamos del resto de muebles o habitaciones, nada mejor que una cómoda con este motivo. En los dormitorios el toque retro estará garantizado con un estampado como éste.
Intenta que el resto de la decoración sea sencilla y en tonos blancos o grisáceos para que combinen y no creamos un entorno muy recargado. Si te faltan las alfombras, opta por unas en blanco y negro como éstas. Tu casa será elegante y sencilla, al mismo tiempo que muy moderna.