Porque nos gusta ir combinando conceptos y en este caso, nos quedamos con dos fundamentales. Por un lado, tenemos los espacios reducidos en los dormitorios que sin duda, muchos padecemos y por otro, queremos verlos elegantes y perfectos. Es por ello que tenemos que pensar en ideas que sean prácticas para poder llevar a cabo nuestras reformas. Claro que no queremos que nadie se alborote porque cuando decimos reformas, ya sabéis que se trata de arreglar pequeños detalles. Copia estos ejemplos y seguro que tu casa te lo va a agradecer.
Paredes combinadas
Es uno de los detalles que nos podemos encontrar en este tipo de dormitorios. Para darles un poco más de amplitud, es básico intentan combinar los colores y los detalles. Para comenzar, puedes pintar las paredes de diversas tonalidades. Entre ellas, opta siempre por las más claras y llamativas. Una pared en violeta muy claro, el beige o el blanco serán tus objetivos. Además, siempre puedes aplicar algún papel de pared o vinilos, para completar nuestra decoración de dormitorios pequeños. Usa la luz en los puntos estratégicos, cerca de la cama, como podemos apreciar en la imagen y si quieres algún cuadro que sea en colores neutros.
Estilo juvenil reducido
Es muy común que los dormitorios juveniles también vean cómo su espacio parece menguar y es por ello que siempre tenemos que aprovecharlo al máximo. Para ello, tanto las literas como las camas nido siempre serán nuestra mejor elección. Además, ocuparemos la pared en la medida de lo posible con muebles o estanterías anclados en ellos. La mesa de escritorio también puede ser plegable o partir de una estantería anterior. Siempre serán muebles sencillos y en colores básicos como el blanco con pinceladas en tonalidades intensas que pueden ser anaranjados, verdes o malvas.
Dormitorio clásico
Porque también la decoración clásica tiene un hueco entre los dormitorios más pequeños. Sin duda, los armario empotrados y las camas de igual manera son los básicos para esta nueva idea. La pared vuelve a ser la principal protagonista para poder guardar todo lo necesario en ella. Unas composiciones que la recorren para dejarnos estanterías y camas muy cómodas. Además, siempre hará un rincón para la lectura o para hacer los deberes, que no viene mal. La televisión también andará por las alturas para evitar ocupar más espacio. Los colores para dormitorios con estilo serán el blanco y el amarillo que dan alegría al mismo tiempo que luminosidad al ambiente.