Llamamos decoración industrial a esas habitaciones o casas que están compuestas de un interior de ladrillos, grandes espacios y muchos ventanales…vamos, lo que podría haber sido una fábrica pero que se ha remodelado para crear un apartamento o vivienda en general. Es por ello que tanto las paredes más rugosas de lo normal, se unen al cemento y al hormigón como los materiales más usados. A priori puede parecer un lugar con poco estilo pero nada más lejos de la realidad porque sin duda, si sabemos darle nuestro toque, será un sitio idóneo y muy moderno. Hoy vamos a ver algunas ideas de cómo podemos decorar nuestro dormitorio con este estilo industrial.
La primera idea cuenta con una pared de ladrillo que lleva unas letras y en las que podrás colocar también cuadros de madera o con colores básicos en negro. Los detalles vintage también siempre van acordes con este tipo de decoración. Además, podremos darle un toque colorido si nos ayudamos de unos edredones estampados de flores y combinando tonalidades tan diversas como el verde o el rosa, aunque siempre bajo la base del blanco y de los colores tierra. La sencillez ante todo, por lo que no debemos de recargar este ambiente.
Claro que aunque los ladrillos de las paredes sean siempre un toque muy especial en este tipo de decoración, también podrás adornarlo o taparlo con papel de colores. Como antes mencionábamos, el papel vintage también puede ser de gran ayuda. Para ello nada mejor que una mezcla de colores pastel como el rosa y el azul para dar lugar a unas flores muy románticas y sencillas. Claro que en esta ocasión, si los colores ya van en la pared, entonces optaremos por la ropa de cama en colores básicos como es el blanco. Una mesita de noche de corte clásico también será parte fundamental del mobiliario.
También, a todo dormitorio industrial se le puede añadir un toque más romántico y con mucho estilo. ¿De qué manera?, pues con una lámpara grande que cuente con varias bombillas y muchos adornos de un mismo color. En esta ocasión serán fundamentales los colores grisáceos y blancos. Cojines y pequeñas lámparas en las mesitas son también esa parte fundamental en el ambiente. Un entorno que no busca el color en sus paredes pero sí en los complementos que las adornan. Otra manera de crear un ambiente único y perfecto.