Todos sabemos que los colores tierra, a la hora de decorar, nos van a aportar un entorno muy delicado y sutil, a la par que acogedor y nada recargado. Por eso, siempre son tonalidades muy usadas en el mundo de la decoración de interiores y hoy, nos quedamos con los dormitorios. Es una buena manera de buscar el equilibrio en una habitación en la que siempre necesitamos sentirnos más a gusto. Por eso, no hay nada como una mezcla de colores luminosos que nos aporten un toque más brillante y con más luz a la estancia.
Para comenzar nos quedamos con un ejemplo perfecto, claro que con una idea tan cómoda nos va a resultar un poco más complicado saltar de la cama cada mañana. Para empezar, las paredes siempre deben de contar con esa tonalidad arena o crema ya que de esta manera ya daremos el primer paso para encontrarnos con un interior más cálido. La cama puedes elegirla de madera y combinarla con colores blancos y marrones un poco más intensos. Claro que siempre puedes añadir algún toque de contraste para intentar crear un ambiente mucho más perfecto y original, aunque también el quedarnos dentro del equilbrio de los colores tierra denotan la sensibilidad y el buen gusto.
En este segundo ejemplo, los colores más oscuros ya se apoderan de la decoración y los veremos tanto en las camas como en los demás muebles. Aunque para mantener el mismo gusto y equilibrio, lo mejor es dejar que el color más intenso se vea menos y que el más claro sea el que predomine en la estancia. Las paredes en color blanco y el suelo de mármol en un color similar, darán paso a una combinación radiante de tonalidades crema y wengué.
Para las habitaciones más pequeñas, lo mejor es dejarnos llevar por la combinación del color crema y del blanco. Si queremos un punto de contraste, entonces lo integramos en los detalles como los cojines o la ropa de cama. De esta manera, seguiremos el primer paso de dejar que las habitaciones sean de lo más luminosas. Gracias a dejar que los colores más claros sean los protagonistas, lo conseguiremos rápidamente. Eso sí, para una habitación más moderna lo mejor es pintar la parte del cabecero con un toque de dorado y seguro que el resultado es más impactante de lo que pensábamos. Tres ideas para darle más vida a nuestros dormitorios.