Es un concepto que me encanta y tengo que reconocerlo. Aunque está bien eso de tener intimidad y cada habitación con su puerta…quizás una de las ideas revolucionarias están en los denominados lofts que constan de una amplia habitación en la que tendremos todo concentrado.
Zonas abiertas que constan de la cocina, el comedor y como no, el salón, pero para ello, también hay que saber combinar, tanto los colores como los muebles en general, creando así un ambiente de lo más relajado y cómodo para toda la familia.
La cocina puede marcarse con una barra y unos taburetes altos, predominando el mismo color en todas las estancias. Tendremos que ayudarnos de las alfombras para delimitar estos espacios.
Para crear un ambiente más moderno, en la cocina sí podemos usar unos tonos más vibrantes que tendrán que contrarrestar con los muebles y decoración más suave. Materiales sencillos que nos aportan la modernidad necesaria, dejando las mesas hacia el lugar de la cocina y los sofás hacia las ventanas.